Feodosia siempre ha atraído a representantes de la alta sociedad. La hermosa naturaleza, junto con el aire curativo, hicieron de este lugar una residencia popular para nobles, empresarios, intelectuales y artistas.
Aquí se han conservado un gran número de antiguas mansiones y casas de veraneo de finales del siglo XIX y principios del XX. Uno de esos objetos de ese período es la dacha Milos. El edificio, impresionante por su lujo, está construido en estilo neoclásico, con la adición de elementos de arquitectura antigua.
Dacha Milos fue construida en 1911 por el arquitecto Piskunov. Sus primeros propietarios fueron la familia de Ibrahim Crimea, un exitoso comerciante de la dinastía Karaite. El elegante edificio tiene fachadas blancas y amarillas, ricamente decoradas con esculturas griegas y molduras de estuco. El diseño incluye elementos complejos, pero se considera cuidadosamente y es armonioso. Lo más destacado de la apariencia arquitectónica son las columnas-cariátides, hechas al estilo de la arquitectura griega.
Los patios están decorados con parterres de flores y fuentes de mármol. En la esquina del edificio se puede ver una rotonda, donde se coloca una copia de la escultura de Venus de Milo, que da nombre a la dacha. Cabe destacar que la primera estatua se perdió durante la Revolución de Octubre. La escultura fue restaurada solo en 1970.
Hoy en día, uno de los edificios del sanatorio se encuentra en el edificio. La gente viene aquí para tratar enfermedades del tracto gastrointestinal y del sistema cardiovascular. También hay cafés y bares dentro de las paredes del edificio.
Otra cabaña de verano, construida a principios del siglo pasado en Feodosia, se llama Stamboli. Perteneció a la familia del fabricante Joseph Stamboli en 1914, pero se vendió en vísperas de la Revolución. Con la llegada del poder soviético, aquí se ubicó un sanatorio. En tiempos de guerra, la institución se convirtió en hospital. Por cierto, durante la retirada de los invasores alemanes, el edificio casi fue volado por un proyectil, pero sobrevivió milagrosamente.
El edificio está diseñado en un estilo ecléctico, que incluye elementos de la arquitectura neo-morisca y Art Nouveau. El centro de la composición es un alto minarete. Los macizos de flores y las fuentes se colocan alrededor del edificio, y las fachadas de la casa de campo están pintadas con exquisitos adornos. El territorio del complejo está rodeado por una valla de piedra con decoraciones talladas.
Hoy en día, hay un hotel dentro de la casa de campo, por lo que cualquiera puede disfrutar del esplendor y el lujo de un antiguo monumento arquitectónico.