Bishkek merece el título de la capital de Kirguistán. El liderazgo del país trabaja aquí. Instituciones financieras y bancos enfocados. La mayoría de las instituciones de educación superior de la república también aceptan estudiantes en esta ciudad. La vida cultural (museos, teatros, centros de exposiciones) es muy agitada.
La fecha oficial para la formación de la ciudad se considera 1878, aunque las primeras referencias en documentos históricos se remontan a décadas. Aquí estaba la fortaleza Peshkek, perteneciente a Kokand. La guarnición más grande del valle de Chui estaba estacionada dentro de sus paredes. Fue capturado alternativamente por cosacos rusos, tribus kirguisas, hasta que finalmente se convirtió en un asentamiento ruso-uzbeko. Campesinos de las regiones rusas de Tambov y Penza, Uzbek Tashkent y Namangan se mudaron aquí. Un giro interesante en la historia de la ciudad ocurrió en 1924, cuando los cooperadores de Checoslovaquia prácticamente convirtieron a Peshkek en una especie de ciudad moderna (según los estándares) de Europa Central.
El nombre de la ciudad ha cambiado varias veces. En la época soviética, se llamaba Frunze, en honor del revolucionario comandante del Ejército Rojo, nativo de estos territorios, M.V. Frunze. Después del colapso de la URSS se convierte en Bishkek.
El centro de la capital kirguisa es la plaza Ala-Too. Muy luminoso, espacioso, crea un ambiente alegre. En un asta alta, la bandera del estado se está desarrollando en el viento. Un guardia de honor se encuentra a los pies las veinticuatro horas del día. Cerca hay un monumento a Manas el Magnánimo, el héroe de la épica nacional "Aikop Manas". Se hizo famoso por sus actos heroicos, logró unir al pueblo kirguiso. El monumento está incluido en la lista del patrimonio cultural de la UNESCO.
Al otro lado de la plaza hay un monumento a otro digno residente de Kirguistán, el escritor Chingiz Aitmatov. Cerca, rodeada por una columnata semicircular sobre un pedestal gris, se encuentra la "Reina Alai". Kurmanzhan-Datka vivió a principios del siglo XIX-XX, es conocido como el líder de los kirguises de Alai, participó activamente en las actividades del gobierno, tenía el rango de coronel del ejército imperial ruso.
En la Plaza Ala-Too se encuentra el Museo Estatal de Historia. Fue fundado en 1927. Las colecciones dedicadas al patrimonio épico kirguiso y una exposición constante de joyas nacionales para mujeres desde la antigüedad hasta el presente atraen la atención.
El edificio del Museo Histórico está rodeado por un área de parque. Cerca: un teatro dramático, un museo de esculturas al aire libre, monumentos a Lenin, Marx y Engels.