La antigua ciudad bielorrusa de Borisov ya ha cruzado el siglo IX desde su fundación. Este asentamiento tiene una rica historia, en particular, militar. La crónica de Borisov está llena de sangrientas batallas y revoluciones, por lo que nada más que 200 años se ha conservado entre los monumentos. Sin embargo, entre ellos puedes encontrar muchos objetos únicos.
Los visitantes de Borisov se encuentran invariablemente con la estación de ferrocarril, construida en 1914, en un estilo arquitectónico clásico. El edificio está decorado con áticos sobre la entrada principal, estilizados como torres de palacio.
La tarjeta de visita de la ciudad es la Catedral de la Resurrección, construida en 1874. Las paredes del templo tienen una exuberante decoración de piedra, pintada de blanco, en contraste con las fachadas rojas.
Según una larga tradición, se construyó una plaza de mercado cerca del templo principal de la ciudad. Las antiguas galerías comerciales se han conservado aquí, sin embargo, en apariencia ahora no son casi diferentes de los modernos pabellones interiores. Ahora este mercado actual se llama Staro-Borisovsky. Cerca hay un monumento al Príncipe Boris Vseslavich, el fundador de la ciudad.
La zona está rodeada por los antiguos edificios de la ciudad que datan del siglo XIX. Entre estas lindas casas de dos pisos es muy agradable caminar cuando hace buen tiempo.
No muy lejos de la principal iglesia ortodoxa de Borisov se encuentra la Iglesia Católica de la Natividad de la Virgen María, el edificio más antiguo de la ciudad, erigido en 1806. Ante él, a lo largo de la calle de la 3ª Internacional, puedes conocer la Gran Sinagoga.
Moviéndose en dirección al río Berezina, puede subir a los restos de la prisión del castillo de Borisov, desde donde se abre una hermosa vista de la ciudad.
Entre las partes históricas y nuevas de la ciudad, ubicadas en ambas orillas de la Berezina, se lanzan 3 puentes, caminando o pasando por los cuales también se puede ver un extenso panorama de la ciudad.
Uno de los lugares históricos más emblemáticos, las baterías Borisov, es una serie de barrancos y murallas de tierra que se construyeron durante la guerra con Napoleón. Cerca del complejo hay un sitio conmemorativo. En la misma área, puede visitar el museo local de la tradición local, dentro de cuyos muros habrá una historia sobre la destacada historia de estas tierras, la vida cultural en diferentes épocas y la riqueza natural.